En ese momento llega Luciano, quien le dice a Isabela una mentira, de que ellos tres vinieron a visitarlo porque es su cumpleaños, pues en realidad Luciano aún no cumple años.
Gonzalo llama a Isabela y la invita a una finca por unos días, ella acepta e irá acompaña de Luciano.
Por otra parte, Flor se enteró de ello y se preocupa al saber que Luciano estará solo con Isabela, por lo que se le ocurre ir a aquella finca, pero su madre Pepita no queda convencida de la idea de su hija.
Al día siguiente, en el camino a la finca, Isabela toma varias fotos de los paisajes, divirtiéndose al lado de Luciano. Cuando se estacionan en una gasolinera para llenar el auto de la señorita, Isabela le da una tarjeta de cumpleaños a Luciano, que hizo la noche pasada. Luciano se conmueve por el acto de la bella dama.
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